Diego Maradona: El Dios oscuro

Diego Maradona: El Dios oscuro

Una leyenda, un dios, un número y un icono argentino. Diego Armando Maradona era más que un simple jugador, era la representación casi mística del fútbol de los ochenta. Sin embargo Maradona, recién fallecido, tenía su parte de sombra, sus debilidades y sus contradicciones.

Maradona y el fútbol: hasta la muerte

Maradona formaba parte de aquella categoría de personas con el bolsillo feliz pero la mente triste. Esta parte oscura de la vida del jugador argentino se debe principalmente al lugar predominante y tóxico del dinero en el mundo del fútbol. De hecho, en 1982 Maradona se convirtió en el futbolista con el traspaso más caro del mundo, al ser transferido al F.C Barcelona por 8 millones de euros. Al conocer el modo de vida europeo y catalán , el jugador caería en un importante uso de drogas. Este sería el punto de ruptura en su vida.

Después de dos temporadas en Barcelona, Maradona llegó a Italia. El 5 de julio de 1984, el Napoli lo adquirió por 9 millones de dólares, convirtiéndose así en el jugador más caro por delante de Ruud Gullit, Chris Waddle y Ronald Koeman.

Sin embargo, su primera temporada no estuvo al nivel de las expectativas. Con la llegada de un nuevo entrenador, Ottavio Bianchi, y nuevos fichajes, el Napoli se fortaleció y logró alcanzar la tercera posición en la siguiente temporada.

Al final de esa temporada, Maradona embarcó hacia México con el equipo argentino, donde ganó la histórica Copa del Mundo de 1986. La « mano de Dios », el « golazo del siglo », la humillación inglesa, o la victoria sobre el adversario alemán son episodios que forman ya parte del imaginario colectivo y que contribuyeron a forjar su mito.

Viviría sus mejores años de su vida en Italia. En 1987, el Napoli ganó el campeonato italiano por primera vez en la historia, robándoselo a la Juventus de Michel Platini, su rival directo en el campeonato. Pero a pesar del talento del equipo, el Napoli tuvo que luchar para establecerse en el escenario europeo, ganando solamente una Copa de la UEFA en 1989.

Maradona y la Historia de Latinoamérica

 Pero lo que hace de Maradona un personaje particularmente original y a veces desconcertante son sus relaciones con la política latinoamericana. Fue un firme partidario de la izquierda socialista sudamericana y de los partidarios de la revolución bolivariana, y siempre expresó sus convicciones políticas con fuerza. A menudo se codeaba con los grandes líderes populistas como Fidel Castro o Hugo Chávez y era descrito como el « Che del deporte, el argentino que pretende ser el representante del mundo libre y sobretodo de una sociedad argentina libre”. De hecho, compartía una filosofía común con Che Guevara, especialmente a través de sus discursos antiimperialistas.

El deseo de usar su notoriedad para participar en la política se percibió en su lucha contra la dictadura entre 1976 y 1983. En efecto, apoyó mucho los derechos humanos en Argentina y desfiló con las Madres de la Plaza Mayo, que buscaban a sus niños desaparecidos bajo la dictadura.

Maradona y la « leyenda negra »

En 1986, Maradona llamó a un nuevo agente, Guillermo Coppola, que, a través de su fama y de sus contactos, hizo del futbolista una verdadera figura mediática. Maradona adquirió entonces la imagen de un hombre escandaloso con estrechos vínculos con la mafia napolitana, llamada la Camorra.

A pesar de las creencias populares, Maradona no fue el que marcó el comienzo de la era del « foot-business ». Esta práctica llegó mucho más tarde. Los diferentes traspasos de Maradona eran altos, pero similares a los de otros famosos jugadores de su época.

A veces considerado como un blanco fácil y a veces presentado como una figura maliciosa, Maradona siempre fue uno de los temas favoritos de los medios de comunicación. Su estilo de vida desarticulado siempre ha sido objeto de críticas. Su actitud cuestionable siempre ha sido objeto de atención, y así fue hasta los últimos momentos de su vida.
Este lado oscuro es evidentemente inseparable de su leyenda.