Este año, el Festival de Cine Latinoamericano de Biarritz (FBAL, Festival de Biarritz Amérique Latine), dedicado al cine y a las culturas de América Latina, arrancó su 32ª edición durante un fin de semana, en paralelo al Festival Internacional de Cine de San Sebastián. Pero el FBAL no se dejó robar protagonismo: reunió a prestigiosos invitados como Costa-Gavras, Gael García Bernal y Pablo Larraín; además, innovó con la creación de un nuevo premio. No obstante, el tema central estuvo dedicado al 50 aniversario del golpe de Estado de Pinochet, el cual marcó profundamente a la sociedad chilena.

Fue con Costa-Gavras, gran cineasta de 91 años, actual presidente de la Cinemateca Francesa y gran testigo de la historia chilena, que el festival abordó este trágico episodio: Estado de sitio (État de siège) y Missing (Palma de Oro en Cannes en 1982). Luego, la presentación continuó con el invitado de honor, Pablo Larraín, quien tiene algunas películas que tratan sobre la dictadura de Pinochet, aunque represente a una nueva generación de cineastas posgolpistas: Santiago 73; No; y su último y distintivo largometraje, El Conde. Para completar este panorama cinematográfico, se programaron las películas del imprescindible Patricio Guzmán: Primer año; Chile, La memoria obstinada; El caso Pinochet y Salvador Allende.

Por otra parte, los encuentros académicos llevados a cabo por el Instituto de Altos Estudios de América Latina, o IHEAL en francés (Institut des hautes études de l’Amérique latine), orquestados por Olivier Compagnon, rememoran el cincuentenario del golpe de Estado que asesinó a la Unidad Popular de Allende. También analizaron el estado actual de esta joven democracia, golpeada por los tormentos del pasado.

El festival también pudo brillar, más allá de ese suceso, gracias a la personalidad luminosa del mexicano Gael García Bernal, galardonado con el 1er Abrazo de Honor por una carrera que destaca la cultura latinoamericana. García Bernal es un actor consagrado que ha trabajado con grandes directores como Iñárritu, Cuarón, Salles o Larraín; es también un guionista-director y productor comprometido. Por ejemplo, está detrás de la creación de una gira de documentales proyectados gratuitamente en plazas públicas remotas de México.

32ª edición del Festival Biarritz América Latina : Cinéma, Chile, Cuba y mucho más

 

Asimismo, la comedia cubana, lúdica y popular, fue evocada gracias a la carta blanca dada al actor Jorge Perugorría (Fresa y Chocolate) para (re)descubrir sus mejores opus cargados de humanidad y de ese humor típico, dispuesto a apoyar la capacidad de resistencia del pueblo cubano. También se celebró una mesa redonda sobre la situación crítica de la producción y distribución cinematográfica en Cuba, salvada actualmente por las colaboraciones internacionales.

Otro de los grandes eventos de la semana fueron los encuentros literarios, que este año, además de la videoconferencia inaugural con Isabelle Allende, hicieron hincapié en el puente entre literatura y cine a través de la obra de varios autores importantes, como Lucía Puenzo, Guillermo Arriaga, Álvaro Brechner y Sergio Bizzio. Se proyectó la última película de Lucía Puenzo, Los Impactados, así como A cielo abierto, dirigida por los hijos de Guillermo Arriaga y basada en un guión que éste había escrito treinta años antes. 

Por último, el FBAL es también música, y este año, además de todos los conciertos nocturnos en el Casino, su público tuvo el inmenso placer de vivir una velada inolvidable con el gran pianista de jazz proteico, Roberto Fonseca.

 

Brigitte Berganton

Brigitte Berganton

Fotos :  Photomobile 

Traducción :  Daymar Toussaint