Las utopías, como los recuerdos,
son cosas que tenemos y que hemos perdido.
Tomado y modificado de “La otra Mujer”.
Woody Allen
Hay una literatura que bien podríamos calificar como de ′no evasión’ y es precisamente lo que el escritor Juninense (Argentina), Andrés Ortiz, nos ofrece en su tercera novela Forja de roble, novela que cierra una saga de tres obras donde Ortiz desarrolla ficcionalmente reflexiones y anhelos humanitarios. Publicada en noviembre del 2022. Sus novelas anteriores Utopía en el 2014 (1990) y El senado de las almas (2015) constituyen una declaración de principio como escritor y como persona cívica.
Forja de roble es una ucronía* técnicamente hablando y una utopía en el sentido de Tomas Moro. El autor para crear la ficción coloca una piedra fundacional sobre un concepto ficcional conocido con el nombre de punto Jonbar,* una operación construida desde un acontecimiento de gran importancia imaginando diferentes resultados y a partir de ahí diferentes devenires históricos (Imaginemos pues el orden mundial desde la perspectiva Norte–Sur si Colón hubiese llegado a tierras canadienses). Ortiz sitúa el punto Jonbar precisamente en el mayo francés, esa revuelta hecha por estudiantes, trabajadores y jóvenes en general, que tomaron la calle para conseguir reformas universitarias y gremiales, libertad a los presos políticos, libertad de expresión y de ser, manifestándose contra el poder envejecido e hipócrita de la Francia y de toda Europa de la década del 60.
Entonces Ortiz piensa en un Mayo francés imaginándolo triunfal con su devenir histórico donde rige el bien común. En ese escenario desarrolla media historia; la otra mitad que es su contracara, es la historia sincrónica y distópica que nos ofrece diariamente el presente del capitalismo salvaje. Y así va construyendo la novela que transcurre principalmente dentro del ámbito del teatro independiente.
La novela fue escrita en tiempo de pandemia (2020 – 2021) y los hechos se desarrollan en ese mismo presente; este hecho no menor habla del compromiso y la plasticidad del escritor para aprender del insólito presente, que no solo fue impredecible y desconcertante sino también aterrador; y aprehenderlo para la construcción ficcional, lo que da cuenta de su capacidad como novelista.
Si bien es una novela coral ya que en su interior hay una pieza de teatro adaptada de Bretch, artículos periodísticos y el desarrollo de dos historias simultáneas una distópica y la otra una ucronía, las diferentes fuentes narrativas machacan sobre el mismo clavo, que es en definitiva la idea que al autor le interesa desarrollar: el anhelo de un mundo más justo, algo así como Teilhard de Chardin piensa en su obra El devenir del hombre. Para desarrollar la idea, Ortiz crea un grupo de personajes con una elevada conciencia social, política, ética y estética.
Las voces que Ortiz trabaja son voces propias que en su función de juez no pudo hacerlas públicas y en su retiro deja salir vehiculizadas por la ficción. Si bien la novela es una ficción porque está escrita en ese registro, también funciona como ensayo por el desarrollo no ficcional que hace de las ideas. Ortiz sabe, como enuncia Ticio Escobar, que el arte y especialmente la literatura cumple una función comprendida en la micro política, actuando en el inconsciente colectivo, bregando por la descolonización y generando una identificación entre hombres y mujeres que rechazan al capitalismo como modelo de convivencia entre pares y de estos con la naturaleza. Consciente de esto, en la novela encontramos ideas muy precisas que desea dejar encendidas y son dichas con la licencia de la belleza poética; así el escritor y ciudadano comprometido entrega su tercera obra, amena, interesante y necesariamente reflexiva.
*Reconstrucción de la historia sobre datos hipotéticos
* El punto Jonbar es un elemento literario que permite recrear escenarios históricos alternativos mediante la supresión o manipulación de un acontecimiento registrado, o por la adición de un suceso ficticio.
El Senado de las almas puede encontrarse en formato para ebook y Forja de roble puede pedirse por email: andresfransiscoortiz@hotmail.com